desfibrilador (DBS)

  • Estimulación profunda del cerebro, mediante electrodos implantados en las estructuras profundas del cerebro (llamadas ganglios basales). Los electrodos están conectados a un marcapasos subcutáneo en el pecho, a través del cual se pueden activar las redes neurológicas responsables del movimiento.
  • El tratamiento está diseñado para mejorar la calidad de vida de las personas que padecen síntomas motores que no desaparecen con el tratamiento farmacológico, o el tratamiento farmacológico se acompaña de efectos secundarios graves.
  • Después del procedimiento quirúrgico, el paciente pasa por un proceso de calibración de los electrodos, hasta alcanzar la eficacia terapéutica óptima. En el futuro, será monitoreado regularmente durante años y se podrán hacer cambios de acuerdo con el progreso de la enfermedad y los síntomas.
  • No todos los pacientes de Parkinson son buenos candidatos para este tratamiento y la decisión de tratarlo depende del neurólogo, del neurocirujano y por supuesto del propio paciente.

 

Complicaciones/efectos secundarios de la cirugía

La operación es extremadamente segura.
Las complicaciones son raras e incluyen infección en el área del dispositivo, daño al tejido cerebral, hemorragia cerebral, convulsiones y colocación incorrecta del electrodo en el cerebro que requiere corrección.
El empeoramiento del habla, el empeoramiento de las capacidades cognitivas (hay diferencias de opinión al respecto porque algunos pacientes tienen deterioro cognitivo incluso sin el marcapasos).
Los efectos secundarios que pueden aparecer al comienzo de la programación y calibración del neuroestimulador son alteraciones sensoriales -como entumecimiento, hormigueo o corrientes en la cara/extremidades- y cambios en el comportamiento o el estado de ánimo. Pero por regla general todo esto pasa rápidamente.  

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