Para prevenir el estreñimiento, es importante comer alimentos ricos en fibra, hacer ejercicio y beber mucho. es tal vez

Suena simple, pero para los pacientes de Parkinson, ninguna de estas acciones se da por sentado.
El estreñimiento afecta aproximadamente al 65% de los pacientes de Parkinson.
18/10/2011
Los problemas intestinales en general, y la reducción del movimiento de los intestinos o el estreñimiento en particular, son muy comunes en las personas que padecen la enfermedad de Parkinson, como resultado, entre otras cosas, de la ralentización de los movimientos intestinales (bradicinesia). Esta ralentización incluye restricciones de movimiento y rigidez en los músculos y es un síntoma visible de la enfermedad y también afecta a los músculos que no se pueden ver a simple vista, incluidos los músculos intestinales, lo que provoca una reducción o ralentización de las deposiciones.
La mala actividad de los intestinos puede verse exacerbada si una persona tiene dificultad para masticar y tragar alimentos, lo cual es bastante común entre los pacientes con enfermedad de Parkinson. Esto puede incluso dificultar el consumo de una dieta rica en fibra dietética, como frutas, verduras y cereales integrales, que ayudan en la formación de bultos de heces blandas y ayudan al funcionamiento del intestino.

La actividad física también puede ayudar al funcionamiento eficiente de los intestinos, pero las personas que padecen la enfermedad de Parkinson pueden tener dificultades para mantener la actividad física. Esto puede causar una estimulación reducida de los intestinos, por lo que los intestinos se vuelven más lentos.

Puede haber personas que reduzcan la cantidad de líquidos que beben por miedo a los temblores y por miedo a vomitar después. Pero esto tiene el efecto de endurecer los grumos fecales y aumentar la dificultad de su paso. A medida que aumenta el tiempo de paso de los bultos fecales, se vuelven cada vez más duros porque el cuerpo absorbe más agua de ellos. Los bultos fecales pueden incluso acumularse en el área rectal y, por lo tanto, pueden contraerse y bloquear el ano. Esos bultos también pueden pasar como bultos de heces o moco líquido.

 Además, si una persona está ansiosa por la actividad de sus intestinos como resultado del uso de ciertos medicamentos, como levodopa y anticolinérgicos, entonces también tendrá dificultad para relajar su cuerpo y músculos de manera efectiva para permitir el paso de las heces. masas y causar una condición continua las paradas El mismo estado de ansiedad puede incluso reducir la eficacia de los fármacos para tratar la enfermedad de Parkinson. La propia enfermedad puede perjudicar la relajación automática de la base de la zona pélvica necesaria para enderezar la última parte del intestino y permitir el paso de las masas fecales. Esto sucede especialmente durante los períodos "secos".

 Tenga en cuenta, por otro lado, que varios medicamentos utilizados para tratar la enfermedad de Parkinson pueden causar efectos secundarios como diarrea. Si ha experimentado un fenómeno de diarrea, se recomienda contactar al neurólogo tratante para cambiar sus prescripciones de medicamentos.

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Traducido por: Yoram Bar-Am
Fecha: 13/08/2011

Ver enlace al artículo original en inglés:

http://www.rewritetomorrow.eu.com/pdsymptoms/bowel-problems/how-might-parkinsons-affect-the-bowels/

Gracias a la Asociación Europea de Parkinson (EPDA) por el uso de la sección anterior y su traducción.
www.epda.eu.com  

www.rewritetomorrow.eu.com